Suelos
La región de Apan ha sido por muchas décadas uno de los principales productores de cebada maltera del país, lo que ha desplazado otros cultivos. Este monocultivo ha afectado gravemente la salud de suelo en el territorio del valle, lo que se refleja en un suelo bajo en materia orgánica, baja productividad y alta erosión.
Para enfrentar esta situación se promueve el desarrollo de prácticas agrícolas sostenibles, educación ambiental y la construcción de un modelo de economía circular. Estos esfuerzos pretenden transformar la manera en la que se producen granos en la actualidad de un modelo industrial a otro sostenible.
Prácticamente todas las actividades agrícolas que se desarrollan en la región dependen del temporal, es decir, se cuenta con una ventana de unos pocos meses para asegurar la producción. Debido a esta situación el valle es particularmente susceptible a los efectos del cambio climático que además de afectar su territorio impactará el modelo económico local altamente dependiente del campo.
Mejora de suelos
A lo largo de un año nos hemos dedicado a entender cual es el estado que guardan los suelos del valle, en particular enfocándonos en los suelos agrícolas, debido a que este tipo de suelos cubren hasta el 80 % del territorio. Cómo resultado de esta investigación se determinó que estos suelos muestran un elevado agotamiento y falta de materia orgánica, lo que ha traído graves consecuencias en diversos factores ambientales en el valle.
Para lograr ese objetivo capacitamos a los agricultores de la región en uso de técnicas alternativas para mejorar las condiciones del suelo. Apoyados en la estructura de los ejidos, una forma de posesión del suelo única en México, desarrollamos jornadas de capacitación orientadas a primero identificar las deficiencias de la calidad de estos suelos y luego remediar sus carencias.
Esta actividad requiere de la participación activa de las comunidades agrícolas que cultivan los campos de la región en su mayor parte dedicadas al cultivo de cebada por demasiados ciclos. Nuestro equipo desarrolla actividades en los distintos polígonos agrícolas, capacitando estos agricultores y también vincula a los agricultores a los distintos programas de gobierno orientados a la mejora de suelos.
Puedes descargar el diagnóstico sobre los suelos de la región desde este LINK
Zanja Y Bordo
Este programa está destinado a restaurar los bordes agrícolas ofrece varias ventajas importantes para la agricultura, el medio ambiente y la sociedad en general. Aquí describo algunas de las más significativas:
Mejora de la Biodiversidad: Restaurar los bordes agrícolas puede incrementar la biodiversidad en estas zonas. Esto incluye una variedad más amplia de plantas, insectos, aves y otros animales. Una mayor biodiversidad ayuda a mantener ecosistemas equilibrados y resilientes.
Control Natural de Plagas: Los bordes agrícolas ricos en biodiversidad pueden albergar depredadores naturales de plagas, reduciendo la necesidad de pesticidas. Esto no solo es beneficioso para el medio ambiente, sino que también puede reducir los costos para los agricultores.
Conservación del Suelo y del Agua: Los bordes agrícolas pueden actuar como barreras naturales para la erosión del suelo. También pueden ayudar en la gestión del agua, filtrando y reduciendo el escurrimiento, lo cual es crucial para mantener la calidad del agua en las zonas circundantes.
Polinización Mejorada: La presencia de una variedad de plantas y flores en los bordes puede atraer a los polinizadores, lo cual es esencial para el cultivo de muchas frutas, verduras y semillas. Esto puede resultar en una mejora en los rendimientos de los cultivos.
Resiliencia ante el Cambio Climático: La restauración de bordes agrícolas puede aumentar la capacidad de un ecosistema para adaptarse a los cambios climáticos. Los sistemas diversificados son generalmente más capaces de soportar eventos climáticos extremos.
Beneficios Estéticos y Recreativos: Los bordes agrícolas restaurados pueden mejorar el paisaje, aumentando su valor estético y ofreciendo oportunidades para actividades recreativas como el senderismo y la observación de aves.
Conexión con la Comunidad y Educación: Estos espacios pueden ser utilizados para educar a la comunidad local sobre prácticas agrícolas sostenibles y la importancia de conservar el medio ambiente.
Apoyo a la Economía Local: Un paisaje agrícola más diverso y sostenible puede atraer turismo ecológico y promover productos locales, apoyando así la economía de las comunidades rurales.







